lunes, 17 de febrero de 2014

Odontología todavía tiene una buena inserción laboral, según informa mifuturo.cl del Ministerio de Educación (sobre el 88,8%), es también la carrera (dentro de las 18 con exclusividad universitaria), que más ha aumentado sus matrículas de pregrado en la última década (253,1%), asimismo, es la carrera que más ha aumentado su tasa de titulación entre las carreras del área de la salud en el mismo período (233,3%).

TITULADOS DE ODONTOLOGIA AUMENTAN EN UN 72% DURANTE LOS ULTIMOS CINCO AÑOS
Actualmente en Chile se está formando la misma cantidad de dentistas que hasta el año 2000, se formaban en más de 68 años, lo que nos llevará inevitablemente al colapso en el corto plazo.

Dr. Sergio Cousiño M.
Consejero Nacional
Colegio de Cirujano Dentistas



 La Educación Superior en Chile está constituida por un sistema diversificado, integrado por tres tipos de instituciones que se ofrecen a quienes egresan de la Educación Media: Universidades, Institutos Profesionales y Centros de Formación Técnica, reconocidas por el Estado en el artículo 29 de la Ley Orgánica Constitucional de Enseñanza (LOCE).

Las Universidades constituyen el más alto nivel de enseñanza, donde convergen las funciones de docencia, investigación y de extensión. Es en este nivel donde se imparten los programas de licenciatura y otorgan los grados académicos, además de otorgar en forma exclusiva los títulos profesionales de las 17 carreras universitarias que se señalan en la LOCE y que requieren licenciatura previa.

Las universidades son instituciones de larga historia en la humanidad. Su quehacer ha sido y es fundamental para la vida cultural, científica, tecnológica y social de las sociedades en que se instalan. En los últimos tiempos han evolucionado modificando la orientación de sus producciones, según los requerimientos sociales.

Se habla de universidades docentes, de investigación y de aquellas que realizan combinaciones de ambas producciones, incluso se reconoce el éxito alcanzado por algunas que recientemente han seguido estrategias de desarrollo en las que vinculan fuertemente la investigación científica y tecnológica con la asistencia técnica y el apoyo a/ y del sector productivo empresarial (Clark, 2004).

Las universidades son instituciones destinadas a generar conocimiento y difundirlo en la sociedad formando los profesionales que ésta requiere para sus diversos desarrollos: productivos, tecnológicos, científicos, educativos, culturales o humanístico, (UNESCO, 1998).

En su quehacer las universidades generan, adicionalmente, una serie de bienes que la sociedad valora, tales como movilidad social, formación de capital humano avanzado, desarrollo de la pluralidad, integración social, “pensar” el país, aporte a una visión de país de largo plazo, impulso de las artes y la cultura y otros similares (Salas y Aranda, 2003).

La docencia universitaria está destinada a preparar los profesionales que un país requiere. Producir profesionales significa conseguir, mediante el proceso educativo, que los alumnos aumenten su dominio de conocimientos, disciplinas y explicaciones de los distintos aspectos de la realidad; que desarrollen sus competencias y capacidades para resolver problemas. Lo cual, desde la perspectiva de la teoría del capital humano (Becker, 1977; Hanushek y Luque, 2003), significa aumentar la productividad de las personas que estudian y/o se titulan anualmente en las universidades, generando un beneficio privado apropiable, de manera importante, por cada profesional titulado en ellas. Y, en términos sociales, significa beneficios para el conjunto del país, que no son apropiables y constituyen externalidades positivas.

Una primera medición de la producción de profesionales que genera cada universidad en un sistema universitario se logra reconociendo la proporción del total de la matrícula de carreras de pregrado del sistema que es atendida por cada universidad y conglomerados de ellas. Este indicador da cuenta de la importancia de esa universidad y/o su agrupación en la docencia universitaria de pregrado que se dicta en un país y a la vez muestra (en cantidad) la orientación que tienen las universidades y sus conglomerados hacia la generación de ofertas educativas para quienes buscan una oportunidad de estudios de pregrado.

Otro indicador de producción de docencia de cada universidad son los alumnos que se titulan como profesionales en cada una de ellas. La participación de cada institución y sus conglomerados en el total de titulados de pregrado es un indicador que informa sobre la importancia de estas corporaciones en la generación de profesionales en un país.

Un indicador preciso de eficiencia productiva es el número de titulados por cada cohorte que ingresa a estudiar en pregrado. En ausencia de este dato se puede alternativamente dimensionar, preliminar y exploratoriamente, la eficiencia en la producción de profesionales con un indicador que relacione la cantidad de profesionales que se titulan en un año determinado en cada universidad con el número de alumnos que ese año están matriculados en cada una de ellas. Este indicador entrega una imagen de la eficiencia relativa con que las universidades realizan el trabajo de formación de los alumnos, al establecer una relación que informa sobre el número de matriculados que tiene anualmente por cada titulado. Coeficientes con valores mayores a 5 veces (6 o 7 u 8 o más veces) hacen pensar en que esa universidad, conglomerado o el sistema presentan niveles de ineficiencia relativa, en la medida que el promedio de años de estudio (oficial) de las carreras universitarias son mayoritariamente de 5 años, como en Chile. Sin embargo, se debe tener presente que estos resultados dependen de la duración de las carreras y también de factores externos que determinan y/o facilitan los logros educativos de los estudiantes (puntajes en las pruebas de selección, notas de enseñanza media, nivel socioeconómico familiar, tipo de capital personal y social que poseen los estudiantes y otros). Otro indicador similar es la relación entre titulados de cada año y alumnos que ingresan al primer año de las carreras de pregrado.

Los resultados en la producción de profesionales están relacionados con la calidad de la docencia universitaria. Una forma preliminar de tener un proxy de ella es saber si las carreras de pregrado que dictan están o no sometidas a procesos de acreditación de sus esfuerzos educativos. Así, un indicador cercano de la calidad de la docencia universitaria será la proporción de carreras de pregrado acreditadas de todas aquellas que dicta cada universidad y sus conglomerados.

El caso de la producción universitaria en Chile

El quehacer y la situación de las universidades del sistema universitario chileno han estado permanentemente en análisis y debate en los últimos años. Para el análisis se separan las universidades en tres grupos básicos: universidades estatales; universidades privadas tradicionales y universidades privadas. Se optó por esta agrupación para conservar la más habitual utilizada en los estudios del sector, aunque se reconoce que son posibles otras, como clasificar según completitud en su quehacer, que permitiría separar las que realizan investigación y docencia de aquellas que centralmente se dedican a la docencia y formación profesional.

En Chile, las universidades son las corporaciones que, principalmente, realizan investigación para producir el conocimiento que la sociedad necesita (OECD, 2009). El indicador de producción de conocimiento científico y tecnológico señala que la mayor cantidad de artículos ISI generada en Chile es realizada por académicos de las universidades estatales. Entre 2002 y 2008, casi la mitad (47,95%) de la producción ISI, promedio anual, del país fue generada por estos investigadores. También, los académicos de universidades estatales chilenas tienen una significativa producción de artículos en publicaciones ScIELO no ISI (46,51%). Las universidades privadas tradicionales (del CRUCH) realizan, en el período 2002 a 2008, la otra casi mitad (47,60%) de la producción de artículos ISI y de publicaciones ScIELO no ISI (47,37%).

Aumento de matrículas de las instituciones chilenas

El primer fenómeno que da cuenta del crecimiento de la oferta en educación superior en el país es el incremento del número de instituciones educativas. Este fenómeno partió durante la década de 1980, pero se mantuvo durante los primeros años de la década de 1990. La posterior reducción de establecimientos se explica sobre todo por la caída en el número de Centros de Formación Técnica y de Institutos Profesionales.

En 1980 sólo ocho instituciones constituían el universo de las universidades del país. La reforma de 1980 permitió la creación de universidades privadas y, al mismo tiempo, otorgó autonomía a las sedes de algunas facultades de las universidades tradicionales, lo que en su conjunto generó la diversificación del sistema y de su oferta institucional. El peak en el número de universidades se alcanzó a mediados de los años noventa, para luego producirse el cierre de algunas entidades privadas y la fusión de otras, en el marco de una fuerte competencia por expandir sus niveles de matrícula.

Según los antecedentes del Servicio de Información de Educación Superior (SIES) del Ministerio de Educación, en la actualidad, son más de 1.184.000 los alumnos forman parte del sistema de educación superior de nuestro país, tomando en cuenta el pregrado, posgrado y postítulo. Y pese a que esta cifra crece cada año, el último tiempo ha habido novedades respecto a su distribución.

En un reciente informe, el SIES informó que las universidades del Consejo de Rectores y privadas siguen manteniendo el mayor porcentaje de estudiantes (59,8%), pero que entre el año pasado y éste su matrícula sólo aumentó un 3,2%, mientras que los institutos profesionales ganaron terreno incrementando su número de alumnos en un 10,4%, lo que se traduce en 30 mil alumnos nuevos.

Ahora, si hay que hablar de la matrícula total de pregrado hubo un incremento del 4,6% en comparación al año anterior, pasando de 1.065.158 estudiantes a 1.114.640. Este aumento también se vio impulsado -a juicio del SIES- por los institutos profesionales, ya que su matrícula total creció un 10,7%. Las universidades del Consejo de Rectores, en tanto, registraron un aumento del 4,5% y los planteles privados, una mínima variación de 0,3%.

El trabajo del SIES deja ver que Ingeniería Comercial, Enfermería, Derecho, Psicología, Ingeniería Civil Industrial y Kinesiología disminuyeron este año la cantidad de alumnos nuevos respecto al año anterior. Sin embargo, muestra un incremento en la matrícula de primer año en Ingeniería Comercial y Psicología.

En el caso de los centros de formación técnica e institutos profesionales algunas de las carreras con más matrícula de primer año son Técnico en Prevención de Riesgos, Ingeniería en Prevención de Riesgos, Técnico en Construcción y Obras Civiles y Técnico en Electricidad y Electricidad Industrial.
En el estudio de Matrícula 2013 del SIES se confirma la tendencia hacia una mayor matrícula técnica y el aumento de estudiantes que ingresan a CFT e IP. Explican que el 2010 por primera vez el ingreso a primer año en este tipo de instituciones superó el 50,1% del ingreso total a la educación superior y que en 2013 llegó a 55,8%, en contraposición con el 44,2% que ingresa a una universidad.

Aumento en la tasa de titulación de las instituciones chilenas

El enorme aumento de las matrículas de pregrado, ha provocado también un aumento de las titulaciones de profesionales. En los últimos cinco años la cantidad de titulados del sistema chileno creció 50,3%, alcanzando los 156 mil titulados en el año 2012. La tasa de titulación de los programas de Educación Superior ha ido en notorio aumento en el sistema chileno. Según datos del Servicio de Información de Educación Superior (SIES), del Ministerio de Educación, pasamos de 104.055 titulados en 2008 a 156.436 en el año 2012, considerando tanto programas de pregrado, como postítulo y posgrado.







 Las cifras del SIES evidencian un incremento a nivel global de la cantidad de titulados del 50,3% en los últimos cinco años. Algo similar a lo que ocurre específicamente con los titulados de carreras de pregrado, que en igual periodo aumentaron en 50,2%. En el caso de los titulados de posgrado el aumento ha sido aun mayor, llegando a 75,5%.

Según el reciente informe Titulación 2012, elaborado por el SIES (publicado en Diciembre 2013), de las 156 mil personas que se titularon en 2012 en educación superior, la gran mayoría (136.421) corresponde a titulados de carreras de pregrado. El resto se reparte entre titulados de posgrado (10.414) y postítulo (9.601). En relación al tipo de institución de educación terciaria desde la cuales se titulan los chilenos, se evidencia que el 60,6% de los titulados en 2012 lo hicieron de una universidad; 23,6% de un instituto profesional (IP) y el 15,8% de un centro de formación técnica (CFT).

Ahora, si el análisis se centra solo en las universidades, se puede observar que las privadas muestran un incremento en sus tasas de titulación de 51,3%, en el período 2008 – 2012. Muy por sobre las universidades pertenecientes al Consejo de Rectores (Cruch), que en igual período experimentaron un alza de titulación del 14,7%.

Odontología, carrera en vía al colapso

Trabajando.com realizó una investigación en la que se analizó el mercado laboral de las carreras profesionales que tienen su mercado laboral más saturado en el país. Luego de revisar las ofertas laborales que son publicadas en el sitio web de Trabajando.com y compararlas con otros datos, por ejemplo, los publicados por mifuturo.cl del Ministerio de Educación, el estudio detectó que existen al menos nueve carreras profesionales que están "sobre saturadas" actualmente en Chile.

En carreras como Veterinaria, Biología, Psicopedagogía y Relaciones Públicas, el porcentaje de egresados que trabaja en áreas relacionadas con lo que estudió no sobrepasa el 15%, ya sea porque el campo laboral es muy pequeño o por el alto número de profesionales existentes. Si bien odontología todavía tiene una buena inserción laboral, según informa mifuturo.cl del Ministerio de Educación (sobre el 88,8%), es también la carrera (dentro de las 18 con exclusividad universitaria), que más ha aumentado sus matrículas de pregrado en la última década (253,1%), asimismo, es la carrera que más ha aumentado su tasa de titulación entre las carreras del área de la salud en el mismo período (233,3%).

En el estudio publicado por el SIES en el mes de Diciembre de 2013, de las aproximadamente 700 carreras que se imparten en el país,  odontología aparece en el sexto lugar, dentro de las carreras que más han aumentado su tasa de titulación durante los últimos cinco años (72%). Lo anterior, es consecuencia del aumento indiscriminado de matrículas que se ha producido como consecuencia del Crédito con Aval del Estado (CAE). Desde su aparición las matrículas de odontología se han multiplicado exponencialmente, con una amplia gama de “calidad” en la formación impartida, sólo el 35% de los programas está acreditado, y de estos, sólo tres universidades tienen acreditada la carrera por el tiempo real que dura (8,8% del total de las carreras impartidas).




Si consideramos los 13.632 estudiantes de odontología existentes en el año 2013 y por otro lado que hasta el año 2003 en Chile se titulaban aproximadamente 200 nuevos dentistas cada año, podemos concluir que actualmente se están formando  la misma cantidad de dentistas que en antaño se formaban en más de 68 años,  lo que indudablemente nos llevará al colapso en el corto plazo (máximo 6 años), por otro lado, si sumamos a esto que la población de Chile se está incrementado a una tasa menor al 1% entre cada censo, el colapso es inevitable.

Referencias:
  1. “Evolución Matrícula Educación Superior de Chile Periodo 1990 – 2009”, Rodrigo Rolando M., Juan Salamanca V., Marcelo Aliaga Q. / Sistema Nacional de Información de la Educación Superior (SIES).
  2. “Educación Superior en Chile” Centro Nacional Tuning Chile. Presentación Educación Superior.
  3. “Matrícula 2013, La matrícula en educación superior aumenta y cambia su distribución” Sistema Nacional de Información de la Educación Superior (SIES) Mineduc.
  4. “Expansión de la Educación Superior en Chile” Gobierno de Chile, Ministerio de Educación.
  5. Quality Assurance in Higher Education in Chile” informe de la OCDE, (Noviembre 2012).
  6. “Aseguramiento de la Calidad: Políticas Públicas y Gestión Universitaria”, Gonzalo zapata, Ivo Tejeda.
  7. “Boletín de Educación Superior”, Sistema Nacional de Información de la Educación Superior (SIES). Mineduc (Diciembre 2013).
8.     “Evolución de la Educación Superior en cifras”, Biblioteca Congreso Nacional.
9.     “Posgrados en Chile se duplican en los últimos seis años y matrícula llega a 36 mil alumnos” Consejo Nacional de Educación (Fuente: El Mercurio)
10.  “Titulados de pregrado aumentan un 50% en cinco años” La Tercera 10 de Febrero 2014.



No hay comentarios:

Publicar un comentario